30 de diciembre de 2017

Una vida con la Selección: Eurobasket ´01

Vuelvo después de un largo tiempo aletargado con esta serie en la que repasamos todos los campeonatos de nuestro Equipo Nacional desde 1973 hasta nuestros días. En esta ocasión toca revisitar el Eurobasket disputado en Turquía en setiembre de 2001. 

Cabe recordar que el denominado espíritu de Atenas se estrelló en los Juegos Olímpicos de 2000.  Aquello sirvió para varias cosas, entre ellas que Lolo Sáinz dejara de ser seleccionador nacional dejando un balance con más oscuros que claros, siendo sustituido por Javier Imbroda, en aquel momento uno de los entrenadores españoles de más renombre. Además, como veremos después, Pau Gasol y Felipe Reyes se unieron a Raúl López y Juan Carlos Navarro y dieron el salto al Equipo Nacional. Gasol lo haría como flamante número tres del draft de 2001. Por último, este Eurobasket sería el despegue hacia la estratosfera de un sueño que aún hoy, dieciséis años después, estamos viviendo. Aunque seguramente más de uno no hubiera apostado por ello en aquel otoño.

Portada de la mítica revista Gigantes

Dieciséis selecciones se dividieron en cuatro grupos. Pasaban a la siguiente fase los tres mejores de cada grupo, estando exentos los primeros de una ronda de octavos de final incompleta. 

Francia quedó primera en el grupo A tras reponerse de una derrota ante Ucrania y vencer en la última jornada a Lituania. La tercera en discordia fue Israel y los ucranianos fueron eliminados.

En el grupo C, Yugoslavia dominó a placer (siendo +13 la menor diferencia frente a Alemania), con los teutones en segunda posición y los croatas de terceros. Estonia fue la cuarta, sin poder ganar ningún partido.

El grupo D fue el más igualado, con Rusia, Italia y Grecia empatados con dos victorias. La aplastante victoria rusa ante Grecia (+25) sirvió para determinar los puestos primero y tercero del grupo.

España quedó encuadrada en el grupo B junto a Eslovenia, Turquía y Letonia. Se venció a los eslavos en la primera jornada (85-61) con Paraíso (17), Gasol (12+10), Navarro (14), Carlos Jiménez (7+8) y López (14) como los mejores del día.

Lo mismo ocurrió ante Letonia (106-77), otra vez con Paraíso (16), Gasol (15+9), Navarro (15+9as) y Alfonso Reyes (15) ante los que nada pudieron hacer Helmanis, Bagatskis o Kambala.

El liderato del grupo y la exención de la próxima ronda se la jugaban los nuestros frente al anfitrión, Turquía. El partido empezó bien, pero en una discutida decisión, Imbroda fue expulsado en el primer cuarto y Gustavo Aranzana tuvo que dirigir al equipo desde el banquillo. España no se pudo sobreponer a esto ni al partido de Kutluay (35 puntos), Besok (12+10), Okur (15) o Turkoglu (13+8, pero 1/9 en T2). Por nuestra parte tiraron del carro Navarro (24) y Gasol (21+10), que quedaron muy solos. El equipo turco era muy bueno y el resultado final podría ser aceptable (79-84), pero sin ayudas arbitrales la cosa hubiera sido distinta...

En la ronda de octavos Alemania eliminó a Grecia (80-75, 25+15 de Nowitzki), Letonia dio la sorpresa a Lituania (94-76) y Croacia hizo lo proio ante Italia (65-57).

España, por su parte, se la jugó ante una correosa Israel que no cedió hasta el final (71-67, el resultado lo dice todo). En un partido tenso, Alfonso Reyes (16+11) y Gasol (13+10) fueron los artífices del triunfo.

En la ronda de cuartos Yugoslavia lo tuvo muy fácil (114-78 contra Letonia con 29 puntos de Stojakovic). Alemania ganó a Francia con 32 puntos de Nowitzki (81-77) y Turquía necesitó prórroga para eliminar a Croacia, necesitando un esfuerzo de 20+14 de Turkcan para doblegar los 28 puntos de Giricek.

España sudó tinta para vencer a Rusia (62-55) en un partido famoso porque Lucio Angulo tuvo el esfínter tenso en un contraataque que prácticamente sentenciaba el partido, siendo perseguido por Chikalkin, el calvo que nos acribilló en los JJOO del año anterior. Alfonso Reyes, Navarro y Angulo fueron los mejores de los nuestros. Pau Gasol (7+9, 25% en tiro) todavía era humano.

En semifinales, Turquía necesitó de una prórroga, de un partido 23+11+8 de Turkoglu y de 24 puntos de Kutluay para deshacerse de un Nowitzki más terrenal (22+10) que en esta ocasión fue secundado por Okulaya (18+17) y Marko Pesic (17).

España se enfrentaba al auténtico Dream Team de Europa por aquella época y, aunque Gasol cumplió (22+11 en 36 minutos) y Lucio Angulo también (12), el mal partido de Navarro (5) nos lastró demasiado para compensar los 30 puntos de Stojakovic.

Dos grandes. Cómo pasa el tiempo.


En la final, los plavi no dieron opción a los locales (78-69), alzándose de nuevo con el título continental y demostrando que practicaban el mejor baloncesto de la época.

El partido por el bronce no fue solo una lucha entre dos potencias emergentes (más claro en el caso de España) sino el primero de los muchos choques que dirimirían dos de los jugadores más determinantes del baloncesto FIBA en el siglo XXI: Pau Gasol y Dirk Nowitzki. El partido parecía sentenciado al descanso (59-42 a favor, con triple de Felipe Reyes), pero Alemania y, sobre todo, Nowitzki (43+15, 5/7 triples, 14/15 tiros libres) no se rindieron. Fue necesario el primer gran esfuerzo de Pau Gasol (31+10) y Juan Carlos Navarro (27+5 as) y la aparición de Jorge Garbajosa (15 puntos en 12 minutos).

El balance no pudo ser más positivo. Seis victorias por solo dos derrotas (ante los dos finalistas) y una medalla de bronce. Pero sobre todo sirvió para marcar territorio y cambiar la tendencia de los años anteriores. Por primera vez en mucho tiempo España tenía materia prima para mirar de tú a tú a las potencias de la época, destacando ya el talento ofensivo de Juan Carlos Navarro y el físico y talento natural de Pau Gasol. Sobre ellos girarían los futuros éxitos colectivos de nuestro Equipo Nacional, casi hasta nuestros días.

Formaron bajo las órdenes de Javier Imbroda: Pau Gasol, Chuck Kornegay, Paco Vázquez, Navarro, Nacho Rodríguez, Felipe Reyes, Carlos Jiménez, Lucio Angulo, Paraíso, Raúl López, Alfonso Reyes y Garbajosa. Tanto Paraíso como Raúl López fueron de más a menos, siendo este sustituido en la dirección de juego por el sobrio Nacho Rodríguez.




2 de diciembre de 2017

Una ventana que se cierra

Reconozco que yo era de los que hablaba de apocalipsis, de catástrofe de dimensiones cósmicas, de vergüenza... Nada de eso se ha cumplido, afortunadamente. 

Este invento de la FIBA, las llamadas Ventanas, que dicen es para fomentar el baloncesto en ciudades y países que normalmente no pueden llegar a disfrutar de un baloncesto de calidad. El invento, digo, que sentó a cuerno quemado a la Euroliga hasta el punto de negarse a modificar su calendario. "Que se lo pidan a la NBA", decían. Claro, ¿por qué unos sí y otros no? Argumento demoledor.

Entre medias se sucedían los mensajes negativos, de Garbajosa, de Scariolo... "Posiblemente Pau ha jugado su último partido con España" y cosas así.  

Bueno, el panorama era desalentador. Sin jugadores NBA, sin jugadores de Euroliga, el panorama pintaba más bien mal. Es el precio que se tiene que pagar por tener un baloncesto de calidad, con jugadores de primer nivel. 

Los Doce del Patíbulo

Enfrente teníamos a Montenegro y a Eslovenia. Cada uno con sus bajas, sí (Vucevic, Rice, Doncic, Dragic, Randolph), pero sin llegar a nuestro desastre patrio. Como ejemplo, Eslovenia tenía todavía a siete campeones del Eurobasket.

¿Nosotros? Ni siquiera uno. Es más, casi ninguno tenía experiencia internacional absoluta. Una mezcla de veteranos (Vázquez, Vidal, Oliver), jóvenes prometedores (Saiz, Vicedo, Sergi Garcia, Javi Fernández, Paulí) y un grupo de jugadores de intendencia (Llovet, Vega, Rabaseda). Dejo aparte a Quino Colom, que ha sido junto con Vázquez el mejor jugador de estos dos partidos, en especial su partidazo frente a Eslovenia. Un jugador que no desmerece a los bases que han ido al último Eurobasket y que, sin duda, merece un puesto cuando también estén los mejores. 

El resultado: dos claras victorias, desde la defensa y el trabajo. Dos victorias, especialmente la conseguida ante Eslovenia, que sirven para reivindicar a los jugadores que no han sentido la tentación de ponerse de perfil ante el marrón que se les venía encima. Nadie daba un duro por ellos, ni siquiera la cadena de televisión que tiene los derechos, que los relegó a la tele por cable. Pero han dado un sonoro puñetazo encima de la mesa y han aparecido en todos los periódicos y medios de comunicación como lo que son, unos grandísimos profesionales que han solventado la papeleta como (casi) nadie esperaba. Incluido yo, me temo.

Il mago di Brescia


Y también hay una mención especial para Scariolo. Que se olió la tostada antes que nadie y empezó a trabajar con un grupo amplio durante la preparación del Eurobasket. Y que no ha dudado en poner en juego el prestigio duramente ganado durante sus años con la Selección para dar un servicio más a su país de adopción. 

Todos ellos.... GRANDES

5 de noviembre de 2017

1x1 de España en el Eurobasket

Ya ha pasado un poco (demasiado) de tiempo desde que terminó el Eurobasket con el premio de la medalla de bronce para nuestro Equipo Nacional y va siendo hora de reflexionar sobre el conjunto y sobre las individualidades de los nuestros. 

Las ausencias por lesión (Llull, Claver) o renuncia (Rudy, Felipe) tuvieron como resultado una lista que creo que todos los aficionados vimos muy descompensada, con una gran carencia en el puesto de tres alto y una falta grave de tiradores que fue aún más delicada cuando los Thunder obligaron a retirar a Abrines en pleno campeonato. 

Esa descompensación en la plantilla se vio en diferentes fases de los partidos, a pesar de que el espejismo de los arrolladores resultados de los partidos de la fase de grupos (luego se vio que el grupo de España era una broma comparado con los demás) y que se vieron en su esplendor en los partidos más ajustados ante Croacia y Hungría, hasta que Eslovenia nos sacó los colores en un partido espléndido de ellos y decente de los nuestros; incluso Rusia se permitió remontar diceiséis puntos en el partido por el bronce, teniendo a su estrella Shved en el banquillo mientras un quinteto de jornaleros nos ponía las cosas extremadamente difíciles. 

Pau Gasol: notable, a pesar del evidente declive anunciado en su temporada en los Spurs y que se confirmó en el Eurobasket. Aunque su calidad le sigue permitiendo influir decisivamente en los partidos y sumar números de élite, ha perdido esa capacidad de dominar en todas las facetas y se le ha visto incluso impotente en algunas fases como en semifinales frente a Eslovenia, superado en defensa por un jornalero como Vidmar. Después del fogonazo del Eurobasket 2015, en el que él solo llevó al campeonato a un equipo peor que el actual (aunque más compensado), creo que hemos sido testigos del principio del fin del más grande jugador FIBA del siglo XXI (con permiso de Parker y Nowitzki). 

El 14


Sergio Rodríguez: ha dado también un paso atrás respecto a otros años. Aunque ha dado alguna que otra señal de dominio de los partidos, ha sido en fases más cortas y sin tanto destello como en campeonatos anteriores. Incluso ha dado la sensación de que el equipo se atascaba más con él que con Rubio por su excesivo manejo de balón. Aprobado.

Juan Carlos Navarro: si ha Pau se le empieza a notar la edad, Navarro es ya casi un ex-jugador. No debería haber sido convocado, así de simple. Muy deficiente.

Ricky Rubio: uno de los que ha dado un paso adelante, mejorado en el tiro, buena defensa y visión de juego. Titular por encima del Chacho, ha sido más efectivo que éste en el conjunto del campeonato. La pena es que, cuando tenían que entrar los tiros, no entraron. Aprobado. 

Marc Gasol: poco parecido se le ve con el jugador total de Memphis. Salvo el fogonazo del partido de Alemania, en el que de no haber sido por él ahora estaríamos hablando de un fracaso absoluto del Equipo Nacional, y el partido ante Rusia, poco reseñable queda por decir. Aprobado. 

Willy Hernangómez: muy bien en la fase de grupos, se fue diluyendo según avanzaba el campeonato y se confirmaba la previsible merma de minutos. A pesar de todo ha demostrado ser el pivot del relevo generacional y ha confirmado que los puntos y los rebotes se le caen de las manos. Va a pasar una dura temporada en los Knicks, a ver como le pasa factura a su carrera. Aprobado. 

Joan Sastre: un agradable descubrimiento. Esforzado en defensa, inteligente en ataque, fue vital en la defensa a Schröder, pero no pudo hacer lo mismo con Dragic o Doncic. Habitual de la segunda unidad, con él en el campo el Equipo Nacional era otro en cuanto a actitud y esfuerzo. Se ha ganado seguir en las listas futuras. Notable. 

Guillem Vives: tercer base, muy tercer base. Quizá mereció algún minutito más en el conjunto del campeonato. Un paso atrás después del buen Eurobasket 2015. Sin calificar.

Siempre el 14


Pierre Oriola: ha dado en garra e intensidad lo que no puede dar por calidad. Incluso adelantó a Willy en la rotación, lo nunca visto. Su movimiento de codos para proteger el balón, terrorífico. Aprobado. 

San Emeterio: no ha destacado, pero tampoco ha desentonado. Un campeonato gris el suyo, del que apenas tengo ningún recuerdo significativo. Aprobado. 

Alex Abrines: era su campeonato. Sin Llull ni Rudy y con Navarro casi retirado, debería haber sido su momento y aportar en ambos lados de la cancha como puede hacer. Lamentablemente sufrió un golpe que le impidió acabar el primer partido y luego fue vetado por los Thunder (un capítulo un poco oscuro que no se llegó a aclarar nunca). Una pena. Sin calificar. 

Juancho Hernangómez: al contrario que Abrines, ha aprovechado su oportunidad con calidad e intensidad, tiro, defensa y rebote. Un poco acelerado todavía, pero en cuanto asiente tenemos ante nosotros al 3-4 del futuro del Equipo Nacional, por encima de Claver. Notable.  

Sergio Scariolo: ha gestinado bien el grupo y no se le puede reprochar nada. Una nueva medalla en el zurrón. Una pena que no se pudiera dar más guerra a Eslovenia, aunque bastante se hizo aguantando la primera mitad. Supo mantener la calma en el partido por el bronce. Acabó dando los minutos por méritos más que por nombres, lo cual no es tan fácil como parece.







23 de septiembre de 2017

Oro justo

Hace ya casi una semana que ha finalizado el Eurobasket, con un sabor agridulce. El balance de España (8-1) es inmejorable, pero no así las sensaciones que quedan atrás. Se ha demostrado que el grupo en el que estaba la Selección no era más que una broma de mal gusto y que el equipo mismo no estaba a nivel de otros años ni al nivel que parecía cuando pasaba el rodillo por encima de sus rivales. 

A la hora de la verdad, cuando la cosa se empezó a ponerse seria, la Selección las ha pasado canutas:
  • Fase de grupos ante Croacia: victoria por solo seis puntos ante un equipo que reservó a su base titular. 
  • Octavos de final: a falta de apenas seis minutos para finalizar el partido el tanteo estaba 56-50 y la cosa prometía tensión sin fin. Tres jugadas de mérito de Ricky Rubio acabaron distanciándonos en el marcador ante un equipo turco bastante pobre.  
  • Cuartos de final: mucho tiempo a remolque, solo el fogonazo devastador de Marc Gasol salvó a España de la debacle. Sin esos diez minutos mágicos, seguro que estaríamos hablando de algo muy distinto ahora mismo. 
  • Semifinal: derrota sin paliativos, veinte puntos abajo y la sensación de destrozo que quedó. A pesar de todo, durante la primera parte el equipo no perdió la cara al partido a pesar del acierto brutal de los eslovenos desde la línea de tres. Por eso es aún más incomprensible la debacle de la segunda parte. Ha sido la derrota más dura, por sensaciones, desde la fase de grupos de Pekín contra los USAboys. 
  • Partido por el bronce: Rusia remonta 16 puntos y se pone a una canasta, con su mayor y única estrella en el banquillo y jugando con un quinteto de intendencia que fue suficiente para hacernos dudar. La diferencia con el partido frente a Eslovenia es que España tenía un tridente efectivo en Pau, Marc y Sergio.

Aquí lo dejo, en lo más alto


Innumerables ausencias (Parker, Batum, Bjelica, Jokic, Raduljca, Nedovic, Rudy, Abrines, Llull, Mirotic, Gallinari, Kanter, Antentokoumpo..., para seguir y no acabar) han igualado el campeonato por abajo, pero aún así ha sido atractivo, con partidos de gran interés: el GER-FRA de octavos; el SLO-LAT de cuartos de final pudo ser perfectamente una final anticipada; el GRE-RUS de cuartos de final; las dos semifinales y la final. 

Demasiados equipos: Islandia, Rumanía, Gran Bretaña... no tienen nivel para competir. Por lo menos habría que quitar ocho equipos y dejarlo en 24.

Nombres propios:
  • D & D: Dragic & Doncic han sido los Simon & Garfunkel de este Eurobasket y han llevado a Eslovenia a lo más alto, mucho más importantes que Randolph.
  •  Kokoskov: ha sido el artífice del triunfo de Eslovenia y del juego brillante y de alto tanteo que reconcilia al aficionado con este bello deporte. Tanto él como Dragic han anunciado su adiós al equipo nacional esloveno.
  • Shved: ha llevado a Rusia sobre sus hombros a un cuarto puesto inesperado en el campeonato.  Jugador de rachas, ha sido máximo anotador del campeonato. Inesperado que Bazarevich le sentara ante España cuando se estaban jugando las lentejas.
  • Porzingis: espectacular cómo se mueve y cómo las enchufa, con el tamaño que tiene. Líder de uno de los tres mejores equipos del campeonato. Tuvo la mala suerte de cruzarse con Eslovenia en cuartos de final, pero ese fue probablemente el mejor partido del campeonato. 
  • Bogdanovic: líder de una Serbia que ha ido claramente de menos a más y que ha terminado jugando muy bien a esto. Con el equipo completo hubiesen sido oro. 
  • Schröder: Daniel Theis y él han llevado a Alemania hasta cuartos de final y casi, casi, nos dan un disgusto. No es un base que me apasione, pero va una y otra vez al aro y saca petróleo. Mejorando la visión de juego y el tiro sería algo portentoso. 
  • Lauri Markannen: deslumbró en la fase de grupos, pero se vino abajo en el partido de octavos ante Italia y Finlandia lo pagó caro. Tiene un gran futuro por delante. 
  • Messina: espectacular la rajada contra las ventanas FIBA, llevó a Italia dignamente hasta los cuartos de final que no podían ganar en ningún caso (18 - 42 en rebotes). 
  • Clase media: Prepelic, Jovic, Lucic, Theis... hay unos cuantos jugadores que han sido muy efectivos y se han hecho un nombre internacional. En España también, pero hablaremos más adelante de ellos. 

Dominador adolescente

Colectivos:
  • Eslovenia ha sido el mejor equipo, pero parece que puede ser flor de un día. Dragic y Kokoskov anuncian su adiós y el compromiso de Randolph me parece cuestionable. Doncic y Prepelic se me antojan demasiado poco para tirar del carro en cuanto las ausencias notables de otros equipos vuelvan al redil. 
  • Letonia ha practicado un gran baloncesto y hubiera sido un rival durísimo en octavos de final. Afortunadamente ganaron a Turquía el último día de la fase de grupos y nos libraron de una probable eliminación temprana. 
  • Lituania y Francia han sido las dos grandes decepciones del campeonato, ambas eliminadas en octavos de final por rivales aparentemente fáciles (Grecia y Alemania respectivamente). 
  • Grecia ha hecho un campeonato de menos a más y perdieron ante Rusia de un magistral Shved. Falta un líder y un monstruo como Antetokoumpo. 
  • Finlandia deslumbró en la primera fase y tuvo la desgracia de jugar su peor partido ante Italia en octavos. Con un partido normal de Markannen, podrían haber ganado. 
  • Georgia ni siquiera se clasificó para octavos, con un equipo bastante apañado (Pachulia, Shengelia, Shermadini...)
  •  
¿Comienza el inexorable declive?

En la siguiente entrada analizaré un poquito a los nuestros. Como aperitivo, creo que el equipo estaba claramente descompensado y que esto, unido a que Pau Gasol ha comenzado a dar síntomas de envejecimiento (reflejado en el partido ante Eslovenia), ha sido la causa de que pasara lo que pasó. Creo también que Navarro ha estado como elemento meramente decorativo y que quizá otros pudieran haber hecho algo más de haber tenido la oportunidad. Y creo que Scariolo no ha tenido la clarividencia de otros campeonatos o que, simplemente, no ha sabido adaptarse al evidente desequilibrio del grupo. 

Pues eso, a pesar del resultado me ha gustado lo que he podido ver. 

El mejor equipo


9 de septiembre de 2017

Comienzan las eliminatorias

Finalizada la fase de grupos del Eurobasket, las diferentes selecciones nacionales clasificadas para octavos han puesto rumbo a Estambul, donde se van a celebrar los partidos eliminatorios, de aquí a la final del próximo domingo 17. 

Aprovecho para compartir una serie de reflexiones: 

GRUPO A
  • Unos desmesurados Dragic y Doncic han llevado en volandas a Eslovenia a liderar su grupo. Única selección junto con España en terminar invicta, con la salvedad de que su grupo era más complicado (FIN, FRA, GRE, POL, ISL). Victorias de mérito y un juego atractivo y dominante. Excepto en su Eurobasket (2013), han sido tradicionalmente frágiles, pero en esta ocasión parece que van a dar mucha guerra. Por el lado de España, deberíamos encontrarnos en semifinales, con incierto pronóstico. 
  • Otra de las agradables sorpresas ha sido Finlandia, con Lauri Markannen y, en menor medida, Kopponen. Segundos de grupo, con una sola derrota frente a Eslovenia. Su victoria más holgada ha sido frente a GRE (+12) y han vencido a POL y FRA en la prórroga. 
  • Los galos están siendo, de momento, una decepción. Aunque su rival en octavos no va mucho más allá y es posible que nos los encontremos en cuartos de final. 
  • Decepción aún mayor ha sido Grecia. Sin referentes, solo han sido capaz de ganar a POL e ISL. Su recorrido debería ser corto. 



GRUPO B

  • Lituania ha sido primera de grupo con una sola derrota, en el partido inaugural contra Georgia (-2). A partir de ahí han ganado solidez, especialmente Valanciunas. Rival duro según avancen en el torneo. 
  • Alemania e Italia han cumplido las expectativas, sin grandes alardes. 
  • Ucrania es la gran sorpresa, clasificándose tras vencer a Georgia. Un grupo de desconocidos en octavos de final, suficiente premio para ellos. Eslovenia debería devolverles a la realidad con facilidad.  
  • Por diferentes motivos, Georgia e Israel son las grandes decepciones. Georgia tenía un equipo bastante apañado con un buen juego interior (Pachulia, Shermadini, Shengelia) acompañados por exteriores solventes. Israel era el anfitrión de su grupo. Ninguno ha cumplido las expectativas. 




 GRUPO D posiblemente el más duro del campeonato

  • Meritorio liderato de Serbia, que solo ha cedido con Rusia. Poco a poco las piezas se van engrasando, con Bogdanovic y Stevic como referentes. También, a ratos, Marjanovic. Serán peligrosos en el futuro.  
  • Letonia y Rusia comparten el mismo balance que Serbia, pero peor diferencia de puntos, lo que ha condenado a los bálticos al segundo lugar y a los rusos al tercero. Letonia tiene más referentes (Porzingis, que está cuajando un buen campeonato, aunque algo eclipsado por el efecto Markannen; Timma; los Bertans...). Son un equipo que no me gusta como rival (si Eslovenia les deja, podríamos llegar a vernos las caras en semifinales y... ¿quién defiende a Porzingis?). Los rusos lo fían todo a Shved y la potencia en la zona de Mozgov. 
  • La gran sorpresa negativa es Turquía. Tradicionalmente ha rascado metal cada vez que ha jugado en casa (Eurobasket 2001, Mundobasket 2010) y un factor determinante en cada caso ha sido el arbitral. Han perdido con Letonia, Serbia y Rusia, aunque con finales apretados. Veremos si no lamentamos que hayan quedado cuartos y no nos den un disgusto.




GRUPO C, posiblemente el más flojo del campeonato

  • Después de España, solo Croacia es digna de mención. Bogdanovic y Saric son los líderes del grupo, al que paradójicamente la ausencia de Tomic parece venirles bien. Dieron guerra en nuestro partido  y resolvieron bien el resto. Al menos deberían vencer a Rusia y plantarse en cuartos de final frente a Lituania
  • La República Checa, por nombre, debería haberse clasificado, pero al final solo ha podido vencer a la débil Rumanía. Todas las derrotas por un margen superior a 10 puntos (-37 ante España, -38 ante Croacia)
  • Hungría, en cambio, venció el partido que tenía que ganar. Hanga ha conseguido lo que no ha podido hacer Satoransky. 
  • Rumanía, sencillamente no tiene nivel para competir y ha sido, junto a Islandia, la selección más débil (pongo un escaloncito por encima a Gran Bretaña, aunque tampoco haya ganado un solo partido)
¿Los nuestros?

De trámite: +23 a Hungría, +41 a Rumanía, +37 a Chequia, + 39 a Montenegro... solo Croacia puso las cosas difíciles, aunque la victoria apenas peligró un poco cuando Bogdanovic despertó en el tercer cuarto.  

La baja de Abrines dará más protagnismo a Navarro, lo que hoy en día no es una buena noticia. Oriola, Sastre y Juancho dan una intensidad defensiva que marca diferencias en los partidos, pero el quinteto inicial parece un poco descompensado (sin tres alto, sale San Emeterio). La parte positiva es que Rubio está tirando mejor que nunca, aunque está por ver si la racha va a durar. Demasiada dependencia de Pau, que sigue haciendo numerazos en muy poco tiempo, y del Chacho. Afortunadamente, el desparpajo de los Hernangómez y la facilidad que tienen para amasar puntos y rebotes, da un buen respiro a los Gasol. Esperemos, por cierto, que Marc llegue a tiempo al campeonato. 




El próximo domingo tenemos una dura piedra de toque en Turquía. Son una banda, sí, pero Cedi Osman es un jugadorazo, juegan en casa y si se junta un día bueno de ellos y uno malo nuestro... No hay que olvidar que la debilidad del grupo ha hecho que no hayamos cogido el pulso a la competición. Cuando en campeonatos anteriores estábamos en la cuerda floja, salía nuestro carácter a relucir. Ahora, que las cosas han ido (muy) de cara, también vamos a necesitarlo. 

PRONÓSTICOS

Los de la fase de grupos los podéis revisar en la entrada anterior. Para los octavos:

  • FRA a ALE por menos de diez
  • ESP a TUR por menos de diez
  • ESL a UCR por más de diez
  • LET a MNE por más de diez
  • LIT a GRE por menos de diez
  • CRO a RUS por menos de diez
  • FIN a ITA por más de diez
  • SRB a HUN por más de diez
Individualidades: De Colo, Pau Gasol, Dragic, Porzingis, Valanciunas, Bogdanovic (CRO), Markannen y Bogdanovic (GRE)

30 de agosto de 2017

Una de pronósticos

No voy a desaprovechar  una oportunidad (más) para demostrar con rudeza mi (des)conocimiento de este deporte que tanto amo. Así que me tiro a la piscina y aquí va mi pronóstico para la fase de grupos de este Eurobasket que comienza mañana. En unos días veremos qué tal va...

GRUPO A: 1. FRA. 2. GRE. 3. ESL. 4. FIN. 5. POL. 6. ISL
GRUPO B: 1. LIT. 2. ITA. 3. GEO. 4. ALE. 5. ISR. 6. UCR
GRUPO C: 1. CRO. 2. ESP. 3. MNE. 4. CHC. 5. HUN. 6.RUM
GRUPO D: 1. TUR. 2. RUS. 3. SRB. 4. LET. 5. BEL. 6. GBR

No. No pongo primera de grupo a España. Creo que Croacia tiene un buen equipo y suele comenzar mejor que nosotros los campeonatos. No obstante, clasificación segura y, espero, relajada. 

No veo a Serbia poder con todas las ausencias que tiene. Se clasificará, pero sufrirá. El primer puesto de Turquía viene a ser porque son anfitriones. 

Lituania me ha gustado mucho. Primera de su grupo de calle. 

A pesar de las ausencias, Francia tiene potencial para imponerse en el suyo. Dudo si Grecia será segunda o lo será Eslovenia, pero finalmente me decanto por los primeros por aquello de la competitividad y la experiencia. 

Animadores: Finlandia, Georgia y Letonia
Fiascos: Polonia, Israel, Alemania, Montenegro, Serbia
Individualidades: De Colo, Doncic, Lauri Markannen, Shermadini, Schröder, Saric, Abrines, Porzingis

Lo dicho, a ver cómo va la cosa.




17 de agosto de 2017

Tres partidos para empezar a rodar

En estas fechas nuestra Selección ha jugado ya tres partidos preparatorios para el Eurobasket de este año, cuya fase de grupos jugará en Cluj (Rumanía), frente a Croacia, Hungría, República Checa, Montenegro y el país anfitrión. 

Tres partidos frente a Túnez, Bélgica y Venezuela. Nada nuevo, aunque el partido ante Bélgica se saldó con una derrota de escándalo (-18) y la grave lesión de Llull. De hecho, quizá esto sea lo más reseñable. 

En cuanto a juego, normal que todavía no sepamos muy bien a lo que vamos. Hay dudas, como siempre o casi siempre, sobre todo con la defensa y el tiro exterior. Supongo que notaremos mucho la falta de Claver (sí, no os riáis, que en los dos últimos campeonatos ha defendido muy bien a los treses altos) y de Rudy. Y también parece que vamos a sufrir con el tiro exterior, lo cual tampoco es nuevo. Aunque también sería razonable pensar que, con la batería de pivots que tenemos, se debería dominar el rebote con solvencia y salir corriendo como balas y lo del tiro podría hasta llegar a ser secundario. 

Esperemos que esta imagen no sea la del Campeonato


Hay bajas: Claver, Rudy, Reyes, Ribas, Mirotic... quizá demasiadas, pero no hay miedo mientras tengamos a Gasol. A Pau, se entiende, que a Marc ya le tuvimos y se saldó con un bronce que subo a poco (vale, estaba Orenga por medio). Con 37 años cumplidos sigue siendo más de medio equipo. 

Reconozco que no entiendo cómo Navarro puede ir convocado después de los últimos dos años que lleva. O tres años, quizá. Pero la cosa es que la lesión de Llull puede cambiar las cosas y Navarro puede estar llamado a dar minutos importantes, ya que Abrines está bastante desaparecido y detrás de estos dos hay más bien poco. 

Otra cosa que no me gusta: la dirección de juego. Reconozco que soy un hater de Ricky, pero es que sigue tirando (y metiendo) más bien poco y eso nos pasará factura cuando las defensas tengan tiempo de plantarse. Y lo mismo parece que han visto, por fin, en Minnesota y lo han empaquetado a la capital de los mormones. 

Pero es que el Chacho abusa mucho del bote y está ralentizando mucho el juego. Eso también nos pasará factura cuando las defensas estén formadas, aunque éste sí que podrá abrir un poco el campo con tiros lejanos. 

Llull no ha explotado en la Selección como ha hecho en el Madrid. Seguramente porque aquí se le pide otra cosa y el reparto de minutos no le favorecía. Una pena, porque tenía ganas de ver qué podía hacer en su plenitud, sin Rudy y con un Navarro crepuscular. 

Solo nos queda encomendarnos a Scariolo y a su plan. Sufrir al principio, ante selecciones y estrellas de calibre: Saric y Bogdanovic en Croacia; Dubljevic y Vucevic en Montenegro (un juego interior tan potente como el nuestro); Satoransky, Hanga... Aunque luego también hay un buen puñado de ausencias de relumbrón que nos pueden favorecer: Jokic, Bjelica, Markovic, Vesely, Parker, Gobert, Gallinari.... 

Me parece que estamos ante un Eurobasket bastante igualado, aunque seguimos aspirando a todo.

Sobre todo mientras tengamos a Gasol con nosotros. Al bueno. A Pau.

De las ventanas FIBA tocará hablar un poco más adelante, y de cómo vamos a gestionar las clasificaciones a los grandes campeonatos, a partir de ahora.

30 de julio de 2017

Campeonas de Europa

No tengo perdón. 

Resulta que las chicas han ganado en Checoslovaquia (bueno, la República Checa) su tercer título de Europa de baloncesto, siguiendo con una racha digna de las mejores Selecciones de la Historia y a la altura de nuestros chicos. 

Bronce en 2001, 2003, 2005, 2009 y 2015
Plata en 2007
Oro en 2013 y 2017

En el período 2001 - 2017, solo han quedado fuera del podio en una ocasión (2011). 

Además, son las vigentes subcampeonas del mundo y olímpicas.  



La cosa no es solo que hayan ganado el campeonato, sino que lo han hecho de una forma casi inmaculada y habiendo perdido solo ante las anfitrionas checas en el último partido del grupo (63 - 67) en el que ninguno de los dos equipos se jugaban nada, estando ya clasificadas las españolas y eliminadas las checas. 

Por el camino quedan las palizas a Hungría (62 - 48 con 17-12 de Lyttle), Ucrania (76 - 54, con 26-8-5 de Torrens y 16-18 de Lyttle), Letonia en cuartos de final (67 - 47, con 20-9-3 de Torrens), Bélgica en semis (68 - 52, con 20-10-2 de Torrens). 

En la finalísima el rival era Francia, subcampeonas en 2013 y 2015, bronce en 2011 y oro en 2009, y que también venían de hacer un campeonato excelso (+27 en cuartos, +22 en semis). 

El resultado lo dice todo: 71-55 con Lyttle (18-8) cubrienndo un día más gris de Torrens. 

¿Cuáles han sido los dos denominadores comunes del campeonato? Pues las enormes palizas infligidas a los rivales y el juego elegante y demoledor de Alba Torrens, que con 190 cm de altura se mueve por la pista como una danzarina, no en vano ha sido declarada MVP del campeonato. 

Pues parece buena...


Y, por supuesto, Lucas Mondelo, nuestro seleccionador nacional, que ha conseguido un equipo coral que asume que Alba Torrens y, en menor medida Sancho Lyttle (ejemplar compromiso de la nacionalizada), son las puntas de lanza, pero también que cualquier secundaria está capacitada para coger el relevo y asegurar la victoria. 

Mención especial para Laia Palau, 37 años, récord de internacionalidades con la zamarra roja de España (262), por encima de otra leyenda como Valdemoro (258), Ferragut (253) y Cebrián (252). 



¡Enhorabuena, campeonas!

7 de julio de 2017

Cultura del esfuerzo

Final sorprendente en la Liga Endesa. El Real Madrid, que había dominado con cierta solvencia la temporada hasta la Final a Cuatro, se vio superado en cuatro partidos por el Valencia Basket, que ha superado el mazazo de la pérdida de una final europa que tenía ganada frente a Unicaja. 

Un equipo trabajado por Pedro Martínez, aquel que ganara la Copa Korac en la Prehisteria del baloncesto, allá por 1990, con una seña de identidad basada en el esfuerzo (Cultura del esfuerzo pone en su camiseta, no lo olvidemos) y peones no exentos de calidad. 

Un EQUIPO con todas las letras, que se enfrentó a otro más basado en las individualidades y que estaba roto desde la derrota en la Final a Cuatro. Hay que ver cómo puede cambiar un equipo y cuánto pueden cambiar unos jugadores, en tan poco tiempo.



El primer título de un equipo. El primer título de muchos jugadores que se han enfrentado de tú a tú a otros aparentemente mucho más experimentados y preparados para estos lances, pero que tras la primera y trabajada victoria en Madrid, naufragaron de forma tremenda en los siguientes tres choques, hasta que el título se les escapó de las manos. Esta vez ni siquiera un estratosférico Llull fue suficiente para dejar el título en la capital.

Una derrota sin paliativos del Real Madrid. Mejor dicho, una victoria incontestable del Valencia Basket. Desde el dominio del juego de Pedro Martínez sobre Pablo Laso, pasando por la intensidad y calidad de San M, Rafa Martínez (eterno capitán), Luke Sikma (hijo de la leyenda de Seattle Supersonics y Milwaukee Bucks), Will Thomas, Guillem Vives, Antoine Diot, Pierre Oriola... 



Enfrente apenas Sergio Llull y algunos destellos puntuales. Rudy Fernández pareció toda la temporada, sobre todo al final, más ex-jugador que nunca. Anthony Randolph defraudó en los momentos calientes, más allá que como fabricante de gorros de bella factura, pero no ha sido eso por lo que se le ha fichado. Othello Hunter ha ido de menos a más en la temporada. Nocioni, Maciulis, Taylor, tres aleros que por unas u otras razones no han estado a la altura de las expectativas... 

Pero si hay alguien que ha fracasado con todas las letras ha sido Luka Doncic. Deslumbrante en muchos momentos de la temporada, su bajón de juego ha coincidido con el momento culminante de la temporada. Otra vez la Final Four fue su punto de inflexión. Desde ese momento nunca parecieron más frágiles sus 18 años. En el peor momento. 

Hale, ya pasó. Ea, ea.


Y si hay alguien que ha triunfado ha sido Bojan Dubljevic. El gigante montenegrino con pinta de hipster que ha hecho un roto en la zona en cada uno de los partidos de la Final y al que Pedro Martínez ha sabido dosificar con maestría. Y parece que, a pesar de los ofertones mareantes que podrá recibir, se va a quedar un ratito más con nosotros.



Sí, Valencia Basket ha sido un justo ganador de la Liga Endesa 16/17, ganando plaza por derecho propio para la Euroliga de la próxima temporada 

¿Y Pedro Martínez? Pues ha dicho adiós. O le han dicho adiós, no lo sé muy bien. No es la primera vez que pasa que el entrenador del equipo campeón no sigue, pero tampoco es algo habitual que digamos.... Incompatibilidad de caracteres, podríamos decir. 

 


¿Y el Barça? Uy, eso da para una entrada propia.

27 de junio de 2017

Too much firepower

Demasiada potencia de fuego. 

Este sería, quizá, el resumen perfecto de las Finales NBA de este curso baloncestístico 2016-17 en el que los Golden State Warriors se han coronado campeones por segunda vez en tres años, con un record de 16-1 en las eliminatorias que es el mejor de la Historia NBA, por encima del 12-1 del fo´fo´fo´ de Moses Malone y del 15-1 de los Lakers. 




Y no me cabe duda de que hubiera podido ser un 16-0 a poco que se hubieran puesto las pilas en el segundo partido en Cleveland. 

113-91
132-113
118-113
116-137
129-120

No está mal. Un solo tanteo por debajo de los cien y todos los demás por encima de 110. Una diferencia abismal con la final de los Spurs de 1999 en la que no hubo un solo marcador por encima de los cien puntos. 

Así que la cosa ha tenido que ser espectacular, con un intercambio de golpes brutal hasta que uno de los dos rivales hincara la rodilla en tierra para no levantarse más. Y ese ha sido Cleveland, que evidentemente no ha podido mantener el tipo, lastrado por los malos partidos de Korver y Deron Williams, fichados precisamente para añadir potencia de fuego a un equipo que en el Este no ha tenido rival aún cuando se han dejado llevar al final de temporada y perdieron el factor cancha a favor de los Celtics (de poco les sirvió a los Orgullosos Verdes, derrotados 4-1 con Thomas lesionado). 

Especialmente castigado ha salido Kevin Love, muy lejos ya del caché que tenía cuando era de los que cortaban el bacalao en la Liga cuando estaba en los Wolves. En menor medida, Kyrie Irving, porque se ha visto superado en todo momento salvo excepciones puntuales. 

¿Y Lebron? A lo suyo, hacer historia promediando por primera vez un triple doble en una final NBA. Me cuesta todavía tragarle, pero es sin duda uno de los más grandes, a la altura de Jordan y Magic, superando a Bird. 

En el otro bando, un auténtico equipazo: Green, Thompson, Curry... y Durant. ¡Qué fácil hace el baloncesto este tío! En cuatro zancadas se planta en el campo de ataque y se calza un triple de 9 metros como quien hace una bandeja. Si ya los Warriors eran un equipo espectacular, con Durant es simplemente imbatible a una serie a siete partidos. 



Recuerdo grandes equipos, corales (Spurs, Celtics) o individualistas (los Lakers de Jackson, O´Neal y Bryant), pero pocos con la capacidad de romper los partidos como estos Warriors. Desde la revolución que supusieron los Suns o, en el siglo pasado los Warrios de Hardaway, Mullin y Marculionis, no ha habido un equipo con un impacto tan grande en el baloncesto. 

Evidentemente, cuando te apoyas en personajes como aquellos de los que estamos hablando, todo es más fácil. Aunque también ha habido sonoros fracasos al implementar tantos egos (los Lakers de 2004 o de 2013, por ejemplo. 

Si son inteligentes, que lo parece, y mantienen el núcleo del equipo, tenemos dinastía para rato. Y lo peor es que los demás equipos ni siquiera están cerca de hacerles sudar.

22 de mayo de 2017

La importancia de tener un entrenador

La F4 de la Euroliga de baloncesto terminó ayer en Estambul con la coronación del Fenerbahce por primera vez en su Historia, que aplastó (80-64) al Olimpiacos de Spanoulis (sí, otra vez en la final). 

Por el camino se quedó el CSKA, que tuvo el partido ganado frente a los griegos. Y también por el camino se quedó el Real Madrid, que venía de quedar primero en la Liga a doble vuelta y de eliminar al Darussafaka, otro equipo turco, pero que nunca pudo hacer frente al Fenerbahce en la semifinal del viernes.

El Real había dominado con solvencia (23-7, +232), solo arrimado por el CSKA (22-8, +253). En contraste, el fracaso del Barcelona (12-18) en el puesto undécimo. 

¿Que tú me vas a entrenar a mí? Anda, aparta de aquí, chaval


No sería porque el Fenerbahce ya había avisado eliminando al Panathinaikos con el factor cancha en contra. Ni porque jugaba en Estambul, su casa, con el ambientazo que allí se monta cuando juega un equipo turco (las dos actuaciones decentes de la selección turca fueron en el Eurobasket de 2001 y en el Mundobasket de 2010, ambas en su país). 

Pero todo eso palidece cuando se pone en la balanza el nombre de Zeljko Obradovic. Un señor de Serbia con cara de pocos amigos (muchos señores de Serbia que se dedican a esto son malencarados) que lleva ganando Euroligas desde 1992, año en el que aquel triple de Djordjevic se clavó como un puñal en el corazón de la Penya. 

Pero este señor es agradecido, así que devolvió el favor a los verdinegros allá por 1994 (Corny Thompson, Harold Pressley, Ferrán Martínez...) contra el Olimpiacos. 

Y en el 95 hizo campeón al Real Madrid de Sabonis y Arlauckas (y de Antúnez y García Coll como titulares, no lo olvidemos), Cargol, Antonio Martín y demás. 

Luego, cinco más con el Panathinaikos (2000, 2002, 2007, 2009, 2011), en dura pugna con otro grande Ettore Messina. Para el recuerdo cómo desactivo al Barcelona flotando descaradamente a Ricky Rubio.

Para terminar, ha hecho campeón al Fenerbahce dominando a los entrenadores rivales, empezando por el bueno de Pablo Laso y a un Real Madrid que no es tan bueno como parece, dependiendo demasiado de lo que hacen Llull y Doncic (Rudy parece cada vez más un exjugador). 

¿Malencarado yo?


¿En serio Reyes no merece ni un minuto cuando te crujen en los rebotes? ¿En serio Nocioni no tiene que ir ni convocado? ¿Dónde estaban Ayón y Randolph? 

Pero Obradovic y su equipo no pararon ahí y detuvieron al grandioso Spanoulis (algo menos grandioso ayer, por cierto). 

Nueve títulos en 25 años. No esta mal para un señor de Serbia bastante malencarado. 

1 de mayo de 2017

Hasta siempre, Paul

19 temporadas
1.343 partidos de temporada regular (170 partidos de play-offs)
10 veces All-Star
4 veces en mejores quintetos de la NBA
> 26.000 puntos
> 7.500 rebotes
> 4.500 asistencias
> 1.750 robos
1 vez campeón de la NBA con Boston Celtics
1 vez finalista de la NBA con Boston Celtics
#34

Con la eliminación de Los Angeles Clippers (un equipo que merece una entrada por sí mismo), la carrera de Paul Pierce ha llegado a su fin. No pensaba que iba a llegar a tanto cuando los Orgullosos Verdes le eligieron en el puesto 10 del draft de 1998, pero ha superado todas las expectativas. 

He jugado con estos tíos


Un tío que las ha visto de todos los colores en Boston, desde los sótanos de sus inicios, pasando por momentos fugaces de gloria cuando compartía vestuario con Antoine Walker (finalistas de conferencia contra los Nets de Kidd en 2003) y se tiraba más de seis triples por partido (con un 40% de acierto, ojo), la travesía del desierto y los gloriosos tiempos del Big Three. 

Un tío que ha superado un grave apuñalamiento en los inicios de su carrera. 

También con estos


Un tío que ha soportado la mística de los Celtics sobre sus hombros (y los de Garnett), que supo dar un paso atrás y ser uno más para llegar a tocar la Gloria. 

Un tío que, años después de comenzar su declive, supo luchar y conseguir a base de inteligencia lo que el físico ya no podía darle.

Me retiro con estos

Un tío que nunca, nunca, nunca debió salir de Boston (aunque su fichaje y el de KG por los Brooklyn Nets ha dado a los Celtics un buen puñado de primeras rondas del draft en puestos más que interesantes). 

En definitiva, un tío que representa el baloncesto old-school como nadie.  

pero... I´m a Celtic


Por todo esto, gracias, gracias y más gracias.

23 de abril de 2017

20.000 + 10.000 + 3.500 + 1.500 =

Esas cifras ponen en perspectiva la carrera global de Pau Gasol en la NBA, desde que llegara en 2001 como tercera elección del draft hasta hoy, con dos anillos con los Lakers, varias apariciones en All-Stars, varias elecciones en los mejores quintetos e innumerables logros con la Selección Española. 

Solo cuatro jugadores han conseguido cifras similares en sus carreras: Kareem Abdul-Jabbar, Tim Duncan, Kevin Garnett y el nuestro, Pau Gasol. Quizá esto, además de dar mucho vértigo, termine de aclarar un poco las cosas.

Porque Pau Gasol es una figura de nivel mundial, un grande entre los grandes por méritos propios y uno de los mejores jugadores FIBA de todos los tiempos. Quizá, junto a Nowitzki y Parker, de los más determinantes de la Historia del baloncesto FIBA. 

Un tío de 2,15 que puede jugar de lo que quiera, que firma estadísticas de machacona regularidad año tras año y que, casi cada verano, aumenta su leyenda con otra actuación de lujo con la Selección. 

Un tío solidario, con formación en música, medicina y un discurso lejano del deportista tipo. Un ejemplo y un orgullo para todos. 

Un tío del que nos empezaremos a dar cuenta de su importancia cuando se retire. Una retirada que está, tristemente, cada vez más cerca. Y cuando ese día llegue, dejará huérfanos a millones de aficionados y, sobre todo, a nuestra Selección. Porque no se vislumbra en el horizonte una figura que pueda cubrir su baja. No entre los jugadores que tenemos en activo. Y no entre los que están  por venir. 

El baloncesto español ha alcanzado su cima en este muchacho de Sant Boi. 

¡Hasta luego Lucaaas!

11 de abril de 2017

De otro planeta

Más de cincuenta años separan las gestas de Russell Westbrook y de Oscar Robertson, dos especímenes físicos que han logrado promediar un triple doble en la NBA. 

Big O lo hizo apenas un par de años después de llegar a la Liga. Russell tuvo que esperar la marcha de Kevin Durant a los Warriors y tener que echarse el equipo a la espalda en una temporada que está siendo loca en muchos aspectos. 


Big O, un portento físico

Ambos caraterizados por tener un físico más allá de lo normal incluso entre la élite de atletas que supone la NBA, hicieron cotidiano lo que para otros no es más que un fogonazo que brilla como una supernova unas pocas veces en sus vidas. 

Grandes pluriempleados del baloncesto como Jason Kidd, Magic Johnson, Larry Bird o LeBron James no han conseguido lo que estos dos: una temporada de pura excelencia. 

Item más, Westbrook lleva la friolera de 42 triples dobles en la temporada cuando falta un partido más por jugarse. Big O consiguió 41 (181 en el total de su carrera). 

¿El jugador más potente, libra por libra, del baloncesto actual?

Siendo ambas gestas dignas de elogio, doy más valor a la de Westrbrook por varios motivos. Para empezar hay más equipos en la liga, por lo que también hay más kilómetros que recorrer y menos momentos de descanso. Luego, el baloncesto que vivimos es más competitivo que el de la década de los sesenta. Además, Westbrook ha hecho lo que ha hecho jugando diez minutos menos por noche que Robertson. Para finalizar, en los sesenta se jugaba a un ritmo más rápido y el porcentaje de acierto medio era mucho más bajo que ahora, por lo que había más oportunidades para dar asistencias, meter puntos y coger rebotes. 

No obstante, el baloncesto no es solo un puñado de números agitados como en una coctelera. Si así fuera, no estaríamos adorando a Sabonis, a Larry Bird, a Magic Johnson, a Pau Gasol, a Bill Russell, a los San Antonio Spurs o a los Boston Celtics. Sino que nos quedaríamos con el brillo del oropel de los puntos, los rebotes y las asistencias de estos dos monstruos y no tendrían dedos para anillos de campeón

25 de marzo de 2017

Las mandarinas de Llull

Llull es un jugador que no me gusta. Lo siento, no puedo evitarlo. Y lo digo así, de inicio, en una entrada destinada a reconocer que está haciendo un temporadón. 

Ya lleva un par de años a gran nivel, pero lo de este está siendo de traca. Seguramente porque no tiene al Chacho a su lado (por cierto, vuélvete a Europa porque si en Philadelphia está pasando lo que está pasando, quizá haya que asumir que la NBA no es para ti), o porque ha llegado a su madurez deportiva, pero resulta que a su exhuberancia física está añadiendo facetas desconocidas. 

Y aunque el control del juego no es una de sus virtudes, están entrando los tiros finales con una asiduidad terrible. Sigue tirándose unas mandarinas como castillos, pero lo que antes solía ser una pifia, hoy en día suele acabar besando la red para desesperación de sus adversarios. 

Por allí, se sale por allí


Para mí, líder indiscutible del Madrid en la Copa (campo atrás indiscutible ante Andorra, que hubiera sido un merecido semifinalista), y verdugo habitual del Barça tanto en competición doméstica como europea. 

¿Qué ha pasado para que haya dejado de ser una lotería darle el último balón a este tío? Hombre, siempre ha ido sobrado de confianza, pero es que... empieza a ser abusivo. 

Si incluso he dejado de lado una de mis reglas de oro del Supermanager y se ha convertido en uno de mis jugadores habituales... Pues eso, aunque sigue sin gustarme, he de reconocer que el Madrid no sería el Madrid sin él

Por cierto, vaya edición de la Copa del Rey. Partidazos por todas partes. Y el Real Madrid, además de campeón (lo de digno campeón habría que darle un repaso, por el tema de los pasos comentado anteriormente y que me pareció un robo flagrante a un señor equipo como el Andorra), dando espectáculo con anotaciones por encima de los noventa puntos (tanto propios como del rival).

Una pena que no haya baloncesto en abierto, porque hubiera disfrutado este año.

13 de marzo de 2017

Dreissig Tausend Punkte

Aqui va una lista de nombres míticos: Kareem Abdul - Jabbar, Karl Malone, Kobe Bryant, Michael Jordan, Wilt Chamberlain. 

¿Qué tienen en común, además de ser altos, negros y jugar al baloncesto? 

Pues que todos ellos han anotado más de 30.000 puntos en la NBA. Se dice pronto. Hay que tirar muchas veces a canasta, y fallar mucho (sobre todo tú, Kobe), para llegar a esa cifra. Se podría además añadir otro nombre mítico, el Dr. J, si sumáramos los puntos anotados en la loca ABA. 



Para ponerlo en perspectiva, un grande como Shaquille O´Neal se quedó corto por más de mil puntos, Moses Malone por más de dos mil, Olajuwon por más de tres mil y Jerry West por casi cinco mil. En medio, mitos del calibre de Dominique Wilkins, Alex English, John Havlicek, Elvin Hayes, Paul Pierce o Kevin Garnett.

A los cinco mitos originales más Erving, se ha unido hace unos días un espigado teutón con un evidente mal gusto por lo capilar en los inicios de su carrera, Dirk Nowitzki, y el azar ha querido que fuera en el pabellón de los Dallas Mavericks, la única franquicia para la que ha jugado durante toda su carrera y con el calor del público que le ha idolatrado durante todo este tiempo.

Elegido por el visionario Don Nelson en el mismo draft que un tal Steve Nash sin siquiera haber jugado un partido en la Bundesliga de Alemania, nadie podría pensar lo lejos que ha llegado. Una vez MVP de la Liga y una vez campeón, el logro de Dirk es el de la constancia. Cerca de los 1.400 partidos jugados y 50.000 minutos, vale que su media no se acerca a la de los mejores (aún así, anotar cerca de 22 PPP a lo largo de casi dos décadas no está al alcance de cualquiera). 



Además de su impresionante trayectoria al otro lado del Atlántico, seguramente Dirk Nowitzki se disputa el trono de jugador FIBA más determinante de los últimos decenios con Pau Gasol y Toni Parker, cargando sobre sus hombros el peso de una mediocre selección alemana que dio un par de disgustos a nuestros chicos de oro (en los cuartos de final del Mundobasket de Indianápolis en 2002 y en las semifinales del Eurobasket de Belgrado en 2005).

Me alegro por él y por este deporte que tanto me gusta. 

¡Robin Hood!