11 de noviembre de 2012

¿Vuelve Jackson?

No voy a echarme flores, pero esto de los Lakers me lo esperaba (podéis ver una entrada anterior, por aquí mismo, en que vengo a avisar a los entusiasmados seguidores...) y, por qué no decirlo, me congratula como buen celtic que soy.

Los Lakers han comenzado con un estrepitoso registro de 1-4 (sorprendentemente no reflejado en una caída libre en los Power Rankings de nba.com), que se amplía a 1-12 si contamos la pretemporada, y han defenestrado el pasado viernes al gris Mike Brown. En el primer partido sin él, victoria aplastante con Pau Gasol en 14+16.

Hemos visto en este inicio de temporada los mismos vicios de siempre, con Kobe Bryant abusando de los tiros (en menor medida también pasó en los JJOO de Londres) y demostrando que aunque la mona se vista de seda, mona se queda. Steve Nash a tenido un impacto mínimo en el juego, tanto en estadísticas como en manejo de la situación, y ahora mismo estará durante un mes de baja por lesión. Howard ha tenido algún partido impresionante, pero sin continuidad. Y nuestro Pau Gasol ha dejado de ser el reloj suizo de los últimos 11 años y marca mínimos estadísticos en puntos por partido y porcentaje de tiros de campo. 

¿El resto? No existe. Así de claro.

El mejor fichaje que había considerado, el de Antawn Jamison, ha sido otro desastre. Todavía no ha tenido un partido mínimamente digno. Todo eso lastra al quinteto de suplentes cuando los titulares, que ya hemos visto que no están en su mejor momento, circulan hasta el banquillo. Así que los Lakers pierden como no se ha visto nunca.



Se barajaba una terna de sustitutos para Mike Brown de auténtico lujo: Jerry Sloan, Mike D´Antoni y Phil Jackson. Pero parece que es una mera formalidad, puesto que el banquillo ya tiene nombre. Si él quiere, claro, que querrá.

A cambio de un buen montón de dólares.

Otra cosa que pueda enderezar el rumbo, que no lo veo tan claro. El equipo está formado con el culo y mientras Bryant no ceda protagonismo la cosa va a ser complicada.

Miami lo tiene otra vez chupado, parece.